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sábado, 23 de diciembre de 2017

Wonder Wheel

Nacionalidad, año: EEUU, 2017
Director: Woody Allen
Reparto: Kate Winslet, Jim Belushi, Justin Timberlake, Juno Temple

Sinopsis: En la Coney Island de los años 50, Ginny, una actriz reciclada en camarera que mantiene una aventura con un socorrista, y Humpty, un operador de una atracción del parque, ven su vida alterada con la aparición de la hija de él, que huye de unos mafiosos

Como todos los años, llega el momento del habitual encuentro en las salas de cine con Woody Allen. El cineasta neoyorquino nos ha presentado en esta ocasión “Wonder Wheel”, ambientada en Coney Island en los años 50, un escenario que brilla en muchas ocasiones más que la propia película.


“Wonder Wheel” es una cinta correcta con puntos positivos, pero se siente como una de las cintas menores del director. En su historia y personajes, tanto en el fondo como en la forma, se observan patrones respecto a otras obras de Allen (de las recientes, además) lo que, unido a cierta falta de alma, acercan más a la cinta a la categoría de producto rutinario que de obra del director.

Allen nos presenta una historia acerca de una mujer que se encuentra atrapada en la vida que está llevando, entre el arrepentimiento por sus errores pasados, la sensación de haberse quedado estancada y no haber alcanzado sus objetivos y su desencanto con la vida que lleva actualmente. Su tabla de salvación la encarna el personaje al que da vida Justin Timberlake, con el que espera dar un giro a una vida que se ve trastocada con la llegada de la hija de su marido.

El director vuelve a demostrar su ya conocida habilidad para hilar elementos dramáticos con cómicos sin ningún problema. El problema, en este caso, radica en que sus personajes no nos dejan ningún tipo de huella y que la historia, con un desarrollo sin sorpresas, no ofrece muchos elementos de interés (más allá de su previsibilidad, porque todo suena a ya visto pero esta vez sin una historia algo más potente o interesante que haga dejar esos aspectos a un lado) Incluso algunos recursos, como la ruptura de la cuarta pared por parte del personaje de Timberlake, chirrían más que otra cosa.

Es en el apartado estético donde “Wonder Wheel” se permite brillar con más fuerza. En la parte positiva, encontramos una excelente fotografía y un gran uso de la iluminación. Como ya hemos visto en otras cintas del director, se asocian ciertos colores a determinados personajes o situaciones. En este caso, podemos observar que en las secuencias que retratan la vida cotidiana de la protagonista junto al personaje de Belushi se utiliza una mayor abundancia de colores fríos, grises y oscuros. Por su parte, en las secuencias que comparte con Timberlake, abundan los tonos naranjas más cálidos. Incluso se llevan a cabo cambios de tonalidad dentro de la misma secuencia, como en una en la que, al comenzar a hablar de su marido, el tono cambia de anaranjado a gris. Esto, unido al uso de colores más vivos procedentes de los letreros de neón y a la estética de los años 50, redondean el apartado estético de la película, que llega a ofrecer planos muy bonitos.

En cuanto al reparto, encontramos un muy buen trabajo de Kate Winslet en el papel protagonista, sacándole todo el jugo posible a la algo arisca Ginny y aguantando los primeros planos sin ningún problema. Aparece bien secundada también por Jim Belushi, que realiza su labor a la perfección. Entre los dos consiguen paliar la faceta más débil del reparto, el dúo formado por Justin Timberlake y Juno Temple, que no están precisamente a la altura.

Hay cosas buenas en “Wonder Wheel”, pero su falta de ritmo, la relativa desgana que se nota en ciertos momentos, y en definitiva, que le falte “chispa”, hacen que, aunque el conjunto de la cinta no sea desdeñable, simplemente sea “una más” de Allen.

Nota: 6

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