Nacionalidad, año: EEUU, 2007
Director: Quentin Tarantino
Reparto: Kurt Russell, Rosario Dawson, Vanessa Ferlito, Zoe Bell, Mary Elizabeth Winstead, Sydney Tamiia Poitier, Rose McGowan, Quentin Tarantino
Sinopsis: Un psicópata que se hace llamar "Especialista Mike" pasa el tiempo dedicándose a asesinar a mujeres jóvenes, utilizando para ello las prestaciones de su coche.
"Death Proof" es una de las dos cintas que integran el proyecto "Grindhouse" que los directores Quentin Tarantino y Robert Rodríguez realizaron en 2007. Estas películas crearon prácticamente un género, y solían ser cintas que podrían considerarse de serie Z, gore y en condiciones que dejaban que desear, además de ser proyectadas normalmente en programas dobles.
Con "Death proof" y "Planet terror", Tarantino y Rodríguez pretendían homenajear esas sesiones de Grindhouse, realizando dos cintas que evocan ese espíritu, y que al menos en Estados Unidos se emitieron conjuntamente (aquí en España no, faltaría más). Planet Terror la vi hace ya unos años, y, aunque creo que cumplía su propósito, me dejó indiferente, en líneas generales (número de baile de Rose McGowan aparte, claro). Pero la que nos ocupa aquí es Death proof.
Bendita bizarrada que se marca el señor director aquí. Death proof es un despiporre constante de sangre, acción, persecuciones y diálogos que mezclan la banalidad con la genialidad. Lo mejor es dejarse llevar por la propuesta y disfrutar, aunque también pienso que no es una cinta para todo el mundo. Incluso a cierto sector de los seguidores de Tarantino es posible que no les guste. Pero a mi las aventuras y desventuras (por llamarlas de alguna manera) del especialista Mike y el grupo de chicas me han parecido dignas de verse.
La película se divide principalmente en dos actos, para contarnos desde dos puntos de vista. El primero de ellos es el de Mike: vemos como él, la idea que tiene acerca de las mujeres y como va a por ellos. Sigue una progresión interesante, desde lo más sencillo y banal hasta aumentar la tensión, culminando en un baño de sangre. El segundo acto está centrado en otro grupo de chicas a las que Mike va a perseguir, y como ya hemos visto como ese tipo actúa, se centra en cómo se comportan sus "víctimas". Durante esos dos actos, Tarantino hace lo que le de la gana: ensucia la imagen de diferentes formas (homenajeando la poca calidad que solían tener las proyecciones), cambia el color, introduce fragmentos en blanco y negro, pone sangre, chicas y a un Kurt Russell desatado al servicio del espectáculo, hace autoguiños y presenta unas escenas de persecuciones excelentemente rodadas.
Lo dicho, "Death proof" no es la mejor película de Tarantino, pero tampoco lo pretende. Los fans del director pueden disfrutar fácilmente con esta nueva vertiente de su obra a poco que se lo propongan. Los detractores la odiarán. Yo me quedo con lo disfrutable que me parece.
Nota: 7
Bendita bizarrada que se marca el señor director aquí. Death proof es un despiporre constante de sangre, acción, persecuciones y diálogos que mezclan la banalidad con la genialidad. Lo mejor es dejarse llevar por la propuesta y disfrutar, aunque también pienso que no es una cinta para todo el mundo. Incluso a cierto sector de los seguidores de Tarantino es posible que no les guste. Pero a mi las aventuras y desventuras (por llamarlas de alguna manera) del especialista Mike y el grupo de chicas me han parecido dignas de verse.
La película se divide principalmente en dos actos, para contarnos desde dos puntos de vista. El primero de ellos es el de Mike: vemos como él, la idea que tiene acerca de las mujeres y como va a por ellos. Sigue una progresión interesante, desde lo más sencillo y banal hasta aumentar la tensión, culminando en un baño de sangre. El segundo acto está centrado en otro grupo de chicas a las que Mike va a perseguir, y como ya hemos visto como ese tipo actúa, se centra en cómo se comportan sus "víctimas". Durante esos dos actos, Tarantino hace lo que le de la gana: ensucia la imagen de diferentes formas (homenajeando la poca calidad que solían tener las proyecciones), cambia el color, introduce fragmentos en blanco y negro, pone sangre, chicas y a un Kurt Russell desatado al servicio del espectáculo, hace autoguiños y presenta unas escenas de persecuciones excelentemente rodadas.
Lo dicho, "Death proof" no es la mejor película de Tarantino, pero tampoco lo pretende. Los fans del director pueden disfrutar fácilmente con esta nueva vertiente de su obra a poco que se lo propongan. Los detractores la odiarán. Yo me quedo con lo disfrutable que me parece.
Nota: 7
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