Nacionalidad, año: España, 2009-2016
Creadores: Daniel Écija, Pilar Nadal, Ernesto Pozuelo y Juan Carlos Cueto
Cadena: TVE
Temporadas: 9 y una película
Episodios: 116
Reparto: David Janer, Javier Gutiérrez, Myriam Gallego, Inma Cuesta, Francis Lorenzo, José Ángel Egido, Guillermo Campra, Patrick Criado, Santiago Molero, Pepa Aniorte, Elisa Mouliaá, Xavier Elorriaga, Roberto Álamo, Eusebio Poncela, Neus Sanz
Sinopsis: Gonzalo de Montalvo, un maestro de escuela con un agitado pasado en el que se incluyen viajes de todo el mundo y aprendizaje de artes marciales, se convierte en el justiciero Águila Roja después de que su esposa sea asesinada, con el objetivo de averiguar quién está detrás
Siete años ha durado. Una serie que comencé a ver con curiosidad, y que, a pesar de darme cuenta pronto de lo floja que es, he seguido viendo por inercia hasta el final, sin saber realmente bien el motivo. Uno, que le cuesta abandonar series una vez se han empezado que se le va a hacer.
No digo que la intención al hacer Águila roja no fuera buena, pero el resultado es el que es. En general, la serie ya tiene un planteamiento bastante absurdo: un justiciero mezcla de ninja y del videojuego "Assassin´s Creed" repartiendo estopa por la capital española (el tema del rigor histórico directamente vamos a dejarlo a un lado, porque no merece la pena) La primera temporada avanzó relativamente rápido a nivel argumental, pero en vista del exitazo que fue, la trama general de la serie se estancó a partir de la segunda.
A partir de ahí, la serie fue de mal en peor. Con la trama general de la serie estancada y sin que los guionistas quisieran avanzarla porque el éxito les acompañaban, la serie se fue llenando de capítulos autoconclusivos en los que los guionistas volcaban todo lo que se les ocurría, para bien o para mal, y en el que las habilidades del protagonista fueron aumentando hasta el punto de esquivar balas o, directamente, desviarlas con un cinturón (no es broma, esto pasó). Llegó un punto en que la serie daba hasta vergüenza ajena. Y creo que de lo mala que era, era hasta divertida. Un despiporre anárquico donde todo valía, literalmente. Y el desbarajuste argumental continuó aumentando hasta el final. En las primeras temporadas aún te encontrabas algún personaje o situación que estaban medianamente bien, pero eso fue desapareciendo.
Los personajes son otro tema. El peor actor y personaje es el protagonista, y así vamos mal. Los que mas destacan son algunos secundarios. En el reparto hay buenos actores, como Javier Gutiérrez o Myriam Gallego, pero la repetición sistemática de sus personajes no les acaba jugando a favor. Muchos rostros conocidos también se han paseado por la serie, y es que no hay que olvidar que la serie, en sus cotas más altas, llegó a tener una media de 6 millones de espectadores, algo que nunca terminaré de entender. Eso le permitió tener 9 temporadas con 116 capítulos (las series españolas de hoy en día es imposible que duren tanto. Muy raro es si pasan de la tercera entrega) y una película que fue un fracaso en taquilla, y que no era más que el típico episodio alargado. Por último, en cuanto a ambientación, no digo que no se dejaran dinero, pero para una serie de estas características se necesita mas y trabajar mejor. Y para mí, hay una norma no escrita en las series españolas que dice que cuanto mas grande se intenta hacer una serie y con más factura, peor les sale. Y se suele cumplir.
No voy a extenderme mucho mas. Es una reseña corta y de la que he dicho pocas o casi ninguna cosa positiva, pero es que siete años después de su comienzo, la verdad es que me cuesta encontrarlas. Sé que si la serie comenzara a día de hoy no la hubiera seguido, pero en su momento así fue. En general, creo que la idea, aunque en general la serie es un disparate, es aceptable, ya que es bueno que haya variedad y seguro que habrá mucha gente que se haya divertido con ella, pero la ejecución es mala en casi todos sus campos. No voy a recordarla demasiado, la verdad.
Nota: 3
Siete años ha durado. Una serie que comencé a ver con curiosidad, y que, a pesar de darme cuenta pronto de lo floja que es, he seguido viendo por inercia hasta el final, sin saber realmente bien el motivo. Uno, que le cuesta abandonar series una vez se han empezado que se le va a hacer.
No digo que la intención al hacer Águila roja no fuera buena, pero el resultado es el que es. En general, la serie ya tiene un planteamiento bastante absurdo: un justiciero mezcla de ninja y del videojuego "Assassin´s Creed" repartiendo estopa por la capital española (el tema del rigor histórico directamente vamos a dejarlo a un lado, porque no merece la pena) La primera temporada avanzó relativamente rápido a nivel argumental, pero en vista del exitazo que fue, la trama general de la serie se estancó a partir de la segunda.
A partir de ahí, la serie fue de mal en peor. Con la trama general de la serie estancada y sin que los guionistas quisieran avanzarla porque el éxito les acompañaban, la serie se fue llenando de capítulos autoconclusivos en los que los guionistas volcaban todo lo que se les ocurría, para bien o para mal, y en el que las habilidades del protagonista fueron aumentando hasta el punto de esquivar balas o, directamente, desviarlas con un cinturón (no es broma, esto pasó). Llegó un punto en que la serie daba hasta vergüenza ajena. Y creo que de lo mala que era, era hasta divertida. Un despiporre anárquico donde todo valía, literalmente. Y el desbarajuste argumental continuó aumentando hasta el final. En las primeras temporadas aún te encontrabas algún personaje o situación que estaban medianamente bien, pero eso fue desapareciendo.
Los personajes son otro tema. El peor actor y personaje es el protagonista, y así vamos mal. Los que mas destacan son algunos secundarios. En el reparto hay buenos actores, como Javier Gutiérrez o Myriam Gallego, pero la repetición sistemática de sus personajes no les acaba jugando a favor. Muchos rostros conocidos también se han paseado por la serie, y es que no hay que olvidar que la serie, en sus cotas más altas, llegó a tener una media de 6 millones de espectadores, algo que nunca terminaré de entender. Eso le permitió tener 9 temporadas con 116 capítulos (las series españolas de hoy en día es imposible que duren tanto. Muy raro es si pasan de la tercera entrega) y una película que fue un fracaso en taquilla, y que no era más que el típico episodio alargado. Por último, en cuanto a ambientación, no digo que no se dejaran dinero, pero para una serie de estas características se necesita mas y trabajar mejor. Y para mí, hay una norma no escrita en las series españolas que dice que cuanto mas grande se intenta hacer una serie y con más factura, peor les sale. Y se suele cumplir.
No voy a extenderme mucho mas. Es una reseña corta y de la que he dicho pocas o casi ninguna cosa positiva, pero es que siete años después de su comienzo, la verdad es que me cuesta encontrarlas. Sé que si la serie comenzara a día de hoy no la hubiera seguido, pero en su momento así fue. En general, creo que la idea, aunque en general la serie es un disparate, es aceptable, ya que es bueno que haya variedad y seguro que habrá mucha gente que se haya divertido con ella, pero la ejecución es mala en casi todos sus campos. No voy a recordarla demasiado, la verdad.
Nota: 3
Nunca entendí como tú y más de media España cayó en las garras de esta serie. Yo vi un capítulo y tuve más que suficiente. Mala malísima en cuanto a ambientación, efectos especiales y en lo que actores se refiere. Nada más que decir.
ResponderEliminarNo te lo voy a discutir. Yo tampoco me lo explico.
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